Hace tiempo que hice esta receta, y se ha convertido en una de mis favoritas, ¡está buenísima!, a partir de aquí descubrí las posibilidades de la masa filo y me he vuelto una amante de esta masa. Este pastel es de origen griego, lo encontré en el libro ‘Culinaria. Grecia’ de la editorial Konemann, lo interesante de este libro es que además de recetas puedes encontrar infinidad de curiosidades sobre la vida en Grecia, sus costumbres, sus platos más tradicionales y la manera de cocinarlos allí por gente local. ¡Es una preciosidad!
Only teardrops – Emmelie de Forest (Eurovision Grecia 2013)
Ingredientes
- 400 gr de espinacas
- 200 gr de queso feta
- 250 gr de pasta filo
- 2 cebolletas
- 1 huevo grande
- 1 cucharada de eneldo picado
- 2 cucharadas de perejil picado
- 1 cucharada de mantequilla
- 1 cucharada de leche
- Aceite de oliva
- Sal
- pimienta negra
Preparación [Precalentar el horno a 180º]
- Picar la cebollita en juliana y sofreirla con mantequilla a fuego lento durante 10 minutos.
- Mientras tanto preparar las espinacas hirviéndolas en agua con sal, cuando estén listas pasar por agua fría, escurrirlas, picarlas un poco y reservar.
- Mezclamos en un recipiente las espinacas junto a la cebolleta, los huevos ligeramente batidos, la leche, el perejil y el eneldo. Añadimos en último lugar el queso feta y mezclamos, pero lo justo para que esté integrado sin que llegue a desmenuzarse por completo.
- Por último salpimentamos, y tenemos el relleno listo.
- Para preparar la masa deberemos pintar con aceite un molde y extender cinco láminas de pasta filo sobre este. Incorporaremos la mezcla de espinacas y cubriremos nuevamente con otras 5 o 6 láminas encima, a la vez que las vamos pintando con aceite. Para cerrarlo, enrrollaremos la pasta que sobresale sobre si misma creando un bordecito de masa filo.
- Antes de meterlo en el horno debemos marcas con un cuchillo las raciones, cortando solo la capa superior. Rociaremos con un poco de agua y ¡al horno! durante una hora o hasta que lo veas que está crujiente y dorado.
La masa filo es un poco complicada de manejar, así que ten cuidado a la hora de sacarla del frigorífico y dejarla expuesta al aire porque se secará muy pronto. Mantenla siempre bien cerrada y sacando solo las láminas que vayas a utilizar.